Greysis de la Cruz
Periodista. Consultora Comunicación Neurolingüística y
Media Training
El estrés arruina la capacidad de
comunicación. Nos hace ver enojados, distantes de los demás. Nos excluye de
oportunidades.
Muchas veces hemos escuchado
decir: “esa persona es difícil” pero, te has preguntado que la hace ser una persona difícil? Sencillo,
es su incapacidad para gestionar sus propias emociones.
Cuando no gestionamos las
emociones se producen “cargas emocionales” que producen un estallido, lo cual indican
que estas fuera de control.
Desde el mismo momento en que te sientas enojada cuenta
hasta 10 o 50, lo que necesites. Piensa: ¿Es esto suficiente para gritarle a
alguien?
Una persona emocionalmente
inteligente se enfada sin llegar a la ira. Y mucho menos lo muestra en público.
El autocontrol es una habilidad que se obtiene con práctica y cuando se hace hábito
nos acorta el camino al éxito.
Gritar a alguien es un error. El
público siempre estará de parte de la persona que demuestre serenidad. Y tus
gritos no te darán la razón aunque la tenga.
Siempre encontraremos personas
con creencias distintas a las nuestras, que harás entonces? Pelearte con todas?
Los gritos generan resentimientos
que pueden evitarse si antes de hablar, mantienes la calma.
No podemos cambiar a las
personas, podemos cambiar a nosotros mismos.
Te recomiendo hacer el hábito de escuchar el doble y hablar
la mitad. Escuchar con los sentidos porque el cuerpo habla. Una cosa se dice
con la boca y otra con el cuerpo.
Mantener una postura de neutralidad, no quiere decir que
seas un blando, quiere decir que gestionas tus emociones inteligentemente. Y
eso facilitará tu comunicación con los demás.
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@greysisdelacruz