Las estadísticas indican que, en promedio, el 80% de las
Pymes fracasa antes de los cinco años y el 90% de ellas no llega a los 10 años.
Los expertos han identificado las cinco grandes áreas de
fracaso de la PYMES:
aquí están.
El éxito de una micro, pequeña o mediana empresa está
fuertemente condicionado por los conocimientos de su dueño. Por eso el 97% de
los casos, el fracaso se debe a una MALA GESTIÓN. Estos son los problemas más
comunes.
Problemas para producir y operar. Falta de capacidad
técnica para manejar la producción y las operaciones, desconocimiento del
sector en que se opera, negligencia y poco interés en el negocio, dificultades
de suministros (materias primas y materiales), altos costes de operación, mal
manejo de las compras, poca experiencia previa con los productos gestionados.
Problemas para controlar. Manejo inadecuado de los
créditos y las cobranzas, fraudes, desconocimiento del verdadero estado
financiero de la empresa, gastos innecesarios, errores graves en materia de
seguridad, mal manejo de los inventarios, fallos graves en los controles
internos, deficiencias en el control presupuestario y de gestión, mala gestión
en materia de endeudamientos y liquidez, mala gestión de los fondos y
similares.
Problemas en la planificación. Deficiencias graves en el
establecimiento de las estrategias, inexistencia de planes alternativos,
establecer objetivos y expectativas poco realistas, inexistencia de un plan de
negocios, planificación inadecuada, crecimiento no planificado, falta de
previsión, falta de estudios de preinversión y similares.
Problemas en la gestión. Incapacidad para rodearse de
personal competente, falta de experiencia, excesivas inversiones en activos
fijos, deficientes sistemas para la toma de decisiones y la solución de
problemas, gestión poco profesional, resistencia al cambio, renuencia a
consultar a externos a la empresa, sacar
del negocio mucho dinero para gastos personales, mala selección de socios, no conocerse a si
mismo, dejarse absorber por la parte agradable del negocio, tener actitudes negativas frente a los colaboradores, nepotismo, mala gestión de los riesgos,
incumplimiento de obligaciones impositivas y laborales, desaliento ante los primeros obstáculos
importantes, pobre cultura empresarial, falta de experiencia en la parte
administrativa del negocio.
Crear una pequeña empresa es fácil si se tienen o se
encuentran los fondos necesarios; lo difícil es mantenerla viva y conseguir que
crezca.
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@greysisdelacruz